Según últimos estudios, la inversión inmobiliaria en España sigue triplicando, en el peor de los casos, las tasas de rentabilidad de los Bonos del Estado a 10 años.
La rentabilidad que ofrece la inversión en viviendas para ponerlas en alquiler ha sufrido una subida de un 1,2% en el último año, debido al fortalecimiento de la demanda de alquileres.
Si calculamos la rentabilidad como la relación entre los precios de venta y alquiler de distintos productos inmobiliarios, nos encontramos con que los locales siguen siendo la inversión inmobiliaria más rentable, ya que ofrece una rentabilidad del 8,3% (frente al 7,5% del año pasado).
Las oficinas, que suponen un mercado no tan uniforme como el de otros productos, ofrecen una rentabilidad del 7,7% (un 6,8% el año pasado).
Los garajes, por otro lado, resultan los productos menos rentables para el inversor, situándose su tasa de rentabilidad en un 5% (aun teniendo en cuenta la subida desde el 4,6% de hace 12 meses).
Oviedo, una de las capitales con tasa de rentabilidad más baja para este tipo de producto: un 3,1%.
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